Farmacia Liberal

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Madera barnizada

Lisboa, Portugal

Fundada en 1890

Nº Inv. 9881

Museo de la Farmacia Lisboa


Sus hermosos armarios de madera de principios del siglo XX presentan motivos de influencia morisca, tallados en la parte superior. La decoración de esta farmacia es muy sobria, casi no va más allá de la representación en las puertas, los símbolos de la Farmacia, la palmera y la serpiente. El mismo motivo se repite en dos hermosas orzas de la Fábrica de Sacavém, de los años cincuenta, con decoración en verde y dorado.


Las lozas decoradas de antaño cedieron su lugar a los frascos de vidrio azul, castaño o incoloro, con hermosos rótulos dorados y a las orzas de porcelana. En los mostradores-escaparate ahora se exponen las diferentes especialidades farmacéuticas, los productos de belleza, los artículos de puericultura y la publicidad.


La Farmacia Liberal, fundada el 11 de agosto de 1890, se estableció en la Avenida da Liberdade, en Lisboa. El Século Ilustrado, lo consideró el 14 de noviembre de 1942 como:


"… una de las mejores farmacias de la capital, debido a sus espléndidas instalaciones, a su magnífico surtido, a su conocida competencia técnica y a la corrección con la que atiende su numerosa clientela."


En el laboratorio de la farmacia se preparaban extractos y tinturas particularmente activas y se perfeccionaban las nuevas formas farmacéuticas como las píldoras, las cápsulas u obleas medicamentosas, los comprimidos o pastillas comprimidas, las cápsulas gelatinosas, los granulados, los gránulos dosimétricos, los solutos inyectables, los supositorios y óvulos, las pomadas y las aguas mineromedicinales.


Como especialidades farmacéuticas preparadas en su laboratorio se distinguían los productos Liber como las Sales de Frutas entre otros y los productos de belleza Salomé, como el agua de colonia y el Elixir, además del famoso perfume Salomé, como a Água-de-colónia e o Elixir, para além do famoso perfume Brisas do Rio.


En esta época su propietario y director técnico era el farmacéutico, Adolfo Teixeira, que ejerció los cargos de presidente de la Sociedad Farmacéutica Lusitana, de la Asociación de los Farmacéuticos Portugueses y director del periódico "O Monitor de Farmácia". Le sucedió en la farmacia Alcindo Teixeira, otro dignísimo representante de la clase farmacéutica, habiendo ejercido también el cargo de director del Gremio Nacional de las Farmacias durante un largo período.